Creo en los signos. Creo que existe una fuerza, un objetivo, un “algo” más grande, que nos lleva, nos arrastra en distintas direcciones según nuestro destino aquí en la tierra.
Hace poco tuve un sueño.
Yo volaba sobre un paisaje urbano, cuando veo una fuente inmensa, que parecía extenderse hacia el horizonte… Era una fuente especial, estaba edificada en forma de cruz, lo que hacia que se estirara hacia las cuatro direcciones… en cada brazo de la cruz había escaleras, por las que el agua corría… recuerdo también que tenia estatuas de leones, de esos con la boca abierta, que suele haber en los edificios…
Por esas escaleras, había mucha gente que bajaba y subía rápidamente.
Yo llegué y me pare al lado de una chica que estaba sentada en la escalera. El agua no parecía molestar a nadie…
Pregunté donde estaba y una anciana me dijo que en esa fuente era para la gente que estaba cambiando de camino.
Yo pregunté entonces que como sabría yo que dirección tenía que tomar. Y ella me dijo simplemente “You must read the signs” (no sé porque pero el sueño era en inglés).
Resulta que sobre las escaleras había realmente carteles, donde había escrito cosas que yo no alcanzaba a leer…
Yo pienso que el sentido del sueño es claro, porque en inglés se usa la misma palabra para “carteles” y para “signos”.
“Tienes que leer los signos”
Y resulta que en este momento yo estoy realmente en un cruce de caminos. E intento leer los signos para saber que dirección tomar. Creo haber visto algunos… ¿pero cómo diferenciar los signos de simple juegos de nuestra mente?
Cualquier cosa puede ser un signo. Un pájaro, una persona, un cartel, una canción… lo que los convierte en signos es lo que sentimos al verlos… porque una señal suele sacudirnos el alma, con más o menos intensidad, dependiendo tal vez de la importancia de lo que intenta decirnos…
Pero es tan difícil verlos… tan difícil diferenciarlos.
Se podría decir que de todas maneras, los signos no son importantes, porque cada uno debe primero hacer lo que quiere y siente… pero “saber” lo que uno quiere no es siempre fácil.
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